Es una forma no invasiva de tomar imágenes de la articulación de la rodilla, al igual que de músculos y otros tejidos circundantes.
A diferencia de las radiografías y la tomografía computarizada (TC), que utilizan radiación, la resonancia magnética utiliza imanes y ondas de radio potentes. El escáner para la resonancia magnética contiene el imán. El campo magnético producido por una resonancia magnética es aproximadamente 10,000 veces mayor que el de la tierra.
El campo magnético fuerza a los átomos de hidrógeno en el cuerpo a alinearse en una cierta forma (similar a la forma como se mueve la aguja de una brújula cuando uno la sostiene cerca de un imán). Cuando se envían las ondas de radio hacia los átomos de hidrógeno alineados, éstas rebotan y una computadora registra la señal. Los diferentes tipos de tejidos devuelven señales diferentes.
Las imágenes por resonancia magnética solas se denominan cortes y se pueden almacenar en una computadora o imprimir en una película. Un examen produce docenas o algunas veces cientos de imágenes.
A usted le pueden solicitar que use una bata de hospital o prendas de vestir sin broches metálicos (como pantalones de sudadera y una camiseta). Ciertos tipos de metal pueden causar imágenes imprecisas.
Usted se acostará boca arriba sobre una mesa estrecha, la cual se deslizará hasta la mitad de la máquina que toma las imágenes por resonancia magnética (IRM). Se pueden colocar pequeños dispositivos, llamados espirales, alrededor de la rodilla. Estos dispositivos ayudan a enviar y recibir las ondas de radio y mejoran la calidad de las imágenes.
Algunos exámenes requieren un colorante especial (medio de contraste), el cual generalmente se administra antes del procedimiento a través de una vena (intravenoso) en la mano o el antebrazo. Este medio de contraste ayuda al radiólogo a observar ciertas áreas más claramente.
Durante la resonancia magnética, la persona que opera la máquina lo vigila a uno desde otro cuarto. Generalmente, se necesitan varias series de imágenes, cada una de las cuales toma de 2 a 15 minutos. Dependiendo del tipo de equipo, el examen puede tomar una hora o más.
A usted se le puede solicitar no comer ni beber nada durante un período de 4 a 6 horas antes del examen.
Antes del examen, coméntele al radiólogo si está actualmente recibiendo diálisis, ya que esto puede afectar el hecho de si usted puede o no recibir un medio de contraste intravenoso.
Si usted le teme a espacios confinados (sufre de claustrofobia), coméntele al médico antes del examen. Le pueden dar un medicamento para ayudarlo a que le dé sueño y que esté menos ansioso, o el médico puede recomendar una resonancia magnética abierta, en la cual la máquina no esté tan cerca del cuerpo.
Los fuertes campos magnéticos que se crean durante una resonancia magnética pueden interferir con ciertos implantes, particularmente marcapasos. Por lo tanto, las personas con marcapasos cardíacos no pueden someterse a una resonancia magnética y no deben ingresar al área donde se realizan estos procedimientos.
Es posible que a usted no le puedan hacer una resonancia magnética si tiene cualquiera de los siguientes objetos metálicos en su cuerpo:
Coméntele al médico si usted tiene uno de estos dispositivos cuando le programen el examen, de manera que se pueda determinar el tipo exacto de metal.
Antes de una resonancia magnética, a las personas que trabajan con láminas de metal o cualquier persona que pueda haber estado expuesta a pequeños fragmentos metálicos se les debe tomar una radiografía del cráneo para verificar si tienen metal en los ojos.
Debido a que la máquina para la resonancia magnética contiene un imán, los objetos que contengan metal, como lapiceros, navajas y anteojos, pueden salir volando a través del cuarto. Esto puede ser peligroso, así que tales elementos no se permiten dentro del área del escáner.
Tampoco se permiten otros objetos metálicos dentro de la sala:
Una resonancia magnética no causa dolor. Algunas personas pueden volverse ansiosas dentro del escáner. Si usted tiene dificultad para permanecer quieto o está muy ansioso, se le puede dar un sedante suave. El movimiento excesivo puede ocasionar errores e imágenes borrosas en la resonancia.
La mesa puede sentirse dura o fría, pero usted puede solicitar una frazada o una almohada. Dado que la máquina emite ruidos sordos o zumbidos fuertes al encenderse, se pueden usar protectores de oídos con el fin de reducir el ruido.
Un intercomunicador en el cuarto le permite a usted hablar con el operador del escáner en cualquier momento. Asimismo, algunos equipos para resonancia magnética tienen televisores y audífonos especiales que usted puede utilizar para ayudar a pasar el tiempo.
No se requiere un período de recuperación, a menos que se necesite sedación. Después de una resonancia magnética, usted puede reanudar la dieta, actividades y medicamentos normales.
La resonancia magnética es una herramienta muy útil para evaluar muchas lesiones y enfermedades de la rodilla diferentes.
El médico puede ordenar este examen si usted tiene:
El médico también puede ordenar este examen para determinar si usted necesita artroscopia de rodilla o para vigilar su progreso después de la cirugía de rodilla.
Los resultados dependen de la naturaleza del problema. Los diferentes tipos de tejidos devuelven señales de resonancia magnética también diferentes. Por ejemplo, el tejido sano devuelve una señal ligeramente diferente al tejido canceroso.
Los resultados anormales puede deberse a:
Consulte con el médico si tiene cualquier tipo de preguntas e inquietudes.
La resonancia magnética no contiene ninguna radiación ionizante y hasta la fecha no ha habido informes de efectos secundarios significativos de los campos magnéticos y de las ondas de radio utilizadas en el cuerpo humano.
El tipo de medio de contraste utilizado más común es el gadolinio, el cual es muy seguro. Las reacciones alérgicas a esta sustancia rara vez ocurren. La persona que opera la máquina vigilará la frecuencia cardíaca y la respiración, en la medida de lo necesario.
La resonancia magnética generalmente no se recomienda para situaciones de traumatismo agudo, debido a que el equipo de tracción y de soporte vital no puede ingresar al área del escáner de manera segura y el examen puede tomar algo de tiempo.
Algunas personas se han lesionado en las máquinas de resonancia magnética cuando no se quitaron los objetos metálicos de sus ropas o cuando otras personas dejaron objetos de metal en el cuarto.
Los exámenes que se pueden hacer en lugar de una resonancia magnética de la rodilla abarcan:
Wilkinson ID, Paley MNJ. Magnetic resonance imaging: basic principles. In: Grainger RC, Allison D, Adam, Dixon AK, eds. Diagnostic Radiology: A Textbook of Medical Imaging. 5th ed. New York, NY: Churchill Livingstone; 2008:chap 5.
DeLee JC, Drez D Jr, Miller MD, eds. DeLee and Drez’s Orthopaedic Sports Medicine. 3rd ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2009:chap 23.
Grainger RG, Thomsen HS, Morcos SK, Koh DM, Roditi G. Intravascular contrast media for radiology, CT, and MRI. In: Adam A, Dixon AK, eds. Grainger & Allison's Diagnostic Radiology: A Textbook of Medical Imaging. 5th ed. New York, NY: Churchill Livingstone; 2008:chap 2.